martes, 27 de septiembre de 2011

Taijutsu

Taijutsu

El Taijutsu es la base de nuestros movimientos dentro del  entrenamiento en la Bujinkan  Budo Taijutsu.
El Taijutsu se traduce como “técnicas del cuerpo”, pero comúnmente lo conocemos como “combate sin armas”.
Gracias al Taijutsu podremos ahorrar energías, evitar aplicar  excesiva fuerza y desgastarnos más de lo debido por medio de la naturalidad del movimiento.

El Taijutsu se encuentra conformado por tres elementos, estos son:

1.- Taihenjutsu

2.- Dakentaijutsu

3.- Koshyjutsu

Taihenjutsu

Son las técnicas de movimiento corporal utilizadas para protegerse, escapar o enfrentar un combate.

El taihenjutsu contempla lo siguiente;
• Ukemi No Kata. Ukemi significa literalmente “caer protegiendo el cuerpo”. Comúnmente se les menciona como “técnicas de caídas”.
• Kaiten No Kata. Literalmente se entiende por kaiten como el giro de los cielos”. En la práctica del Budo, el kaiten hace referencia a técnicas de rodamientos. Dentro de éste, encontramos también Nagare no kata (o nagare waza) que significa “técnicas de rodamiento fluido”.
• Kamae No Kata. Kamae se traduce como “postura”. Es la forma en la que se encuentra nuestro cuerpo en la práctica marcial. En lengua japonesa kamae tiene el sentido de prepararse, ponerse en guardia. Proviene del verbo "kamaeru" se traduce por fabricar, construir, preparar, atender, con intensidad, estar al acecho sobre aquello que viene.

Dakentaijutsu

Son aquellas técnicas que tienen por objeto  golpear el cuerpo. Buscan como afectar el sistema muscular, el sistema nervioso y el óseo,  por medios del  conocimiento de los puntos vitales o zonas de dolor (kyusho).
Dentro del Dakentaijutsu encontramos:
• Kosshijutsu. Significa "ser capaz de derribar a un enemigo con un dedo", y consiste en realizar ataques a los músculos del enemigo.
• Koppojutsu. Consiste en atacar y romper los huesos y articulaciones del enemigo.
• Kyushojutsu. Consiste en golpear los puntos de presión en contrincante (puntos vitales.)

Ju Taijutsu

Son las técnicas destinadas a  controlar, luxar, proyectar, estrangular o inmovilizar el cuerpo del adversario.
Las más destacadas son: 
• Gyaku Waza. Son las técnicas de luxaciones sobre las distintas articulaciones del cuerpo humano.
• Nage Waza. Son técnicas para derribar al oponente por medio de proyecciones.
• Shime Waza. Son técnicas de estrangulación.
Es importante tener en cuenta que, si queremos lograr la máxima efectividad en la realización de una técnica, o si queremos utilizar correctamente las armas, primero debemos pulir nuestro taijutsu. Las armas son la “extensión de nuestro cuerpo”, por ende, la eficacia del daño que genere el arma que utilizamos dice directa relación con la calidad de nuestros movimientos corporales.

Fuentes:

miércoles, 21 de septiembre de 2011

Mitología: Jiraiya Goketsu Monogatari (La leyenda de Jiraiya)


Jiraiya (literalmente 'Joven Rayo'), era el hijo de un poderoso clan de Kyushu. Cuando su familia cayó en la ruina, él se fue a la provincia de Echigo (ahora Prefectura de Niigata), se convirtió en un filibustero y ascendió hasta convertirse en el jefe de una banda de ladrones.
Jiraiya comenzó a instruirse en la magia del sapo gracias a un inmortal que residía en la Montaña Myoko, conocido como Echigo Fuji. Él fracasó al vencer y matar a Sarashina, un hombre viejo que era la causa de la ruina de su familia.
Jiraiya se enamoró Tsunade, una joven guapa que dominaba la magia de la babosa. Tiempo después, uno de los seguidores de Jiraiya, Yashagoro, fue dominado por el hechizo de una serpiente y comenzó a practicar la magia de la serpiente. Yashagoro se cambió su nombre por el de Orochimaru (Orochi significa "Serpiente Monstruosa") y atacó a Jiraiya.
Jiraiya y Tsunade se enfrentaron a Orochimaru, pero el veneno de la serpiente les infectó y cayeron inconscientes. Afortunadamente, otro de los seguidores de Jiraiya, al cual Jiraiya había salvado de la muerte una vez, vino a su rescate. Desgraciadamente, el cuento no tiene final. 

Referencia: http://usuarios.multimania.es/japonmedieval/mitologia.htm
 

domingo, 11 de septiembre de 2011

El Daruma


Quizás todos los que estén leyendo han visto alguna vez uno de estos muñequitos: una representación de Bodhidharma luego de sus nueve años de meditación. Bodhidharma era un monje de la India, 28vo heredero de Siddhārtha Gautama (Buda). Es conocido  (entre otras cosas) por haber permanecido meditando nueve años delante de una pared. En Internet se encuentran varias versiones sobre la leyenda que da origen al muñequito, sin embargo, todas coinciden en que Bodhidharma cortó sus parpados para evitar ser vencido por el sueño. Por está razón, el Daruma (su nombre en Japón) simboliza la disciplina, el esfuerzo y la perseverancia. El muñeco suele regalarse con el fin de hacer un pequeño ritual que consiste en pintar sólo uno de los ojos mientras se piensa en algo que se desea cumplir y que requiere mucha perseverancia. Cuando el objetivo se ha cumplido, es momento de pintar el ojo que quedó en espera. Este tipo de símbolos son un camino directo hacia nuestro inconsciente, por lo que llevar a cabo este tipo de ritos es una forma sutíl y efectiva de darle un mensaje (o una orden). 


Algunas referencias sobre el muñeco y sobre la historia de Bodhidharma:

http://www.dragondejade.com.ar/wp/?p=50
http://www.aprendeseduccion.com/?p=160

viernes, 9 de septiembre de 2011

La flor de loto




La flor de loto es una manifestación maravillosa de la naturaleza, su semilla da origen a una hermosa flor en medio del fango. Este excepcional suceso convierte la flor de loto en un símbolo que recuerda la condición del hombre y sus posibilidades: su ser puede elevarse aún cuando se constituye de un material y en medio de circunstancias corrompibles. Tal como esta flor emerge donde abunda el lodo, manteniendo la pureza de su esencia, nosotros podemos superar las circunstancias que nos hayan tocado. Por esta razón, la flor de loto ha sido símbolo en distintas civilizaciones, mitologías y religiónes, y se utiliza en representaciones que quieren transimitir la idea de pureza y virtud que la caracterizan. La flor de loto proviene de Asia tropical y subtropical y es el símbolo nacional de la India por transmitir valores colectivos como divinidad, prosperidad, renacimiento y pureza.

Lo que simboliza la flor de loto recuerda también los conceptos Gambatte Kudasai o Keep Going, expresiones que, más allá de su significado literal, nos transmiten su poderosa intención: sigue adelante, continua a pesar de las adversidades, da lo mejor de  ti, no te rindas.

"Muchas cosas pueden curar el corazón de las personas, y soy creyente de que el amor y las enseñanzas de la Bujinkan Dojo llevadas por personas correctas, puede ser la medicina del alma. Así como la Flor de Loto nace entre el lodo y se llena de una belleza inexplicable, pienso que de igual manera la Bujinkan nos aporta tesoros luminosos para calmar el sufrimiento que hay en muchas personas." (Shihan Christian Petroccello)


Referencias:
http://tenryuden.wordpress.com/2011/09/09/el-salvador/
http://blogjardineria.com/diversas-historias-sobre-el-origen-de-la-flor-de-loto/
                

jueves, 8 de septiembre de 2011

« ~~~~NATURE DOES NOT THINK~~~~ Kosshi Jutsu by Andrew Young (2001) »

The following is part of an interview I conducted with Hatsumi Sensei for the BKR’s upcoming book. He asked that I get this message out to as many people as possible and I feel the internet is the best way I can do this outside from my own dojo. I translated this very literally so please excuse the flow of the English. I tried to keep the manner in which Sensei speaks as best as I could. Sean Askew 04-27-2001 09:09 PM
Life and death are connected. Like In-Yo ( Yin & Yang ). This is my teaching theme for the year. Like a magnet and metal, life and death are attracted to each other, always getting closer.
If you are born and given a life, death is inevitable. When death comes do not be surprised or shaken. Get on the rhythm of life. Get in balance with it. This is the theme of the year.
That is why I tell my students it does not matter how skilled one becomes in martial arts or even Ninjutsu for that matter, If one can not attain this balance or rhythm.
This is the basis for the Kihon Happo! Not the forms. If you keep practicing the form it does not produce any real results. Always doing the forms is a childish way to practice. There are even times when the form can be what gets you killed.
Often I hear my students argue over topics like « the correctness of this form » or « this posture should be this way » and such. True battle or real fights are never correct. In form or spirit. It is not about that.
If you think the opponent is strong you will naturally go and get something such as a rifle and « boom »!!! Right? Very simple isn’t it?
This type of common sense or « obvious ways » are important. This is why I teach my students;
Jiyu-ni, atarimae-ni
Jibun de narai, jibun de ikiro!
Freely, common sensically,
Learn on your own, live on your own!
Even though I have many students, I do not need them. But they still come to see me right? Because I teach them how to teach themselves. This is why they come to me. But this is very different from just making up Ryu-Ha and such. This is the real path I teach.
All around me I have many strong friends from many countries. Most of them are people who had to survive wars in their own homelands. They are all the real thing. Real warriors. We understand each other on a certain level. My training with Takamatsu Sensei has made me aware of these types of people. It is like we are our own species. Even you Sean, you had to fight for your own survival on several occasions, right? Even stabbed from behind. You had courage and a keen mind to help you survive. But your poor opponent! Ha ha ha!!!!
Bad guys are always planning something devious. They are « big-idea » people. Always coming up with some kind of con. But it is important to develop the mind to withstand these types of people, learn to perceive them. My way is to never think about anything at all. You know me, I am usually not really thinking about any one thing in particular. It is just a matter of « keep going ». This is the best way to guide your students. This is the way it is when you train with me.
When my senior Japanese students make mistakes and go astray I get on them and scold them. It is the same with all my students all over the world. I have no borders. I do not hold anything back from the non-Japanese. I do everything on a man to man basis. This is the way it has always been.
If I do not teach this way my students may be killed when the time comes. It would be very sad for me. This is why I do not teach in a strange and unnatural manner. I teach people to teach themselves. Freely.

Masaaki Hatsumi


Disponible en: http://bujinkangard.wordpress.com/2011/09/07/jibun-de-narai-a-message-from-soke-hatsumi-2001/

domingo, 4 de septiembre de 2011

Significado de la palabra Oss!




Cuántas veces hemos entonado la voz de Oss. Un sonido que el karateca ha incluido en su vocabulario y de forma automática, lo pronuncia sin necesidad de pensar; como si de un gesto natural e innato se tratara.
 
Nos enseño nuestro sensei, que Oss es la voz del saludo; es decir, el sonido que emitimos para contestar o realizar un saludo, al igual que en castellano podríamos decir “hola”o “qué tal”. Pero tras ese sonido, se encierra mucho más; una amalgama de educación y respeto que engloban un conjunto de valores éticos y morales.
 
Parece ser que dicho vocablo proviene de antiguos marineros de la flota naval nipona, donde las órdenes impartidas para realizar maniobras o colocarse en sus puestos de combate, eran tajantes y enérgicas, y los marineros, tras meses en alta mar y bajo los efectos del cansancio, apatía, desmoralización por no poder pisar tierra firme, necesitaban una dosis de motivación y coraje para desempeñar sus tareas con la máxima eficacia. Recordemos que en tiempos de guerra, una actitud desmotivada de un soldado, podía causar graves efectos en sus compañeros, provocando desidia y despistes que provocarían el fracaso de su misión, la muerte de muchos soldados e incluso el hundimiento del navío. Si retrocedemos en el tiempo, este vocablo se podría haber utilizado en aquellas embarcaciones de madera en las que varios marineros debían remar con todas sus fuerzas, y en situaciones de peligro, aumentar si cabe, el esfuerzo sobrehumano para conseguir mayor potencia de la nave, esquivar un arrecife, salvar una ola comprometedora, escapar de enemigos o incluso abordar naves de bandos contrarios. Para ello, tenían un encargado de dirigir las órdenes, el cual voceaba enérgicamente las órdenes a seguir. Otro marinero era el encargado de marcar el ritmo de remada mediante un enorme tambor. La constante descarga de adrenalina y una alta motivación, eran los ingredientes necesarios para continuar vivos.
 
Pero vamos a ver el origen de dicho vocablo. Oss, realmente se transcribiría como Ossu, pero en Japón, la vocal U tras una consonante, se convierte en vocal débil y apenas suena. Por eso, en vez de sonar Ossu, oímos Oss. En algunas escuelas de karate, han transformado la O en una U a base de una “deformación” sufrida a lo largo de los años. Toda lengua viva tiene sus variaciones y ésta no es una excepción.
 
Decir también que Ossu o Oss como lo conocemos hoy día, es la contracción de dos vocablos: Oshi, que significa empujar, lo cual nos da la idea de empujar nuestro problema o un obstáculo para poder esquivarlo o bien anularlo, es decir, ganar a la situación negativa que se nos presenta. El segundo vocablo es Shinobu, que significa resistir, aguantar, soportar, dándonos el concepto de no rendirse ante las adversidades, de mantener siempre la moral alta, de no desfallecer, de continuar en el camino marcado para conseguir el objetivo. Ahora entendemos un poco mejor el origen de esta voz en boca de los antiguos marineros.
 
 En el mundo del karate, cuando decimos Oss, decimos muchas cosas. Expresamos una gentileza en el saludo, estar de acuerdo con una orden o decisión, afirmar algo, cargarnos de coraje para enfrentarnos a un rival, perseverar en la práctica de una técnica hasta lograr dominarla, activar el espíritu de superación, de concentración,  de resistencia al sufrimiento y al dolor. En definitiva, Oss lo es todo en el karate, es la base para ser un buen practicante y absorber los valores éticos y morales que formarán los cimientos de una gran personalidad; en resumen, un karateka.

 
fuente: http://www.karatepicanya.com/Oss.htm
 

viernes, 2 de septiembre de 2011

Urashima Taro (cuento tradicional japonés)

Hace mucho tiempo, en una aldea junto al mar, un joven llamado Urashima Taro vivía con su anciana madre. El muchacho quería mucho a su madre y la cuidaba lo mejor que podía, pues no tenía a nadie más. Vivía de lo que Urashima Taro lograba pescar cada día. Un otoño, día tras día el mar se mantenía revuelto, por lo que Urashima Taro no podía pescar.

Una mañana muy temprano, el pescador fue a la playa y vio las altas olas. Se quedó mirando el mar un poco triste, pues ya llevaba varios días sin poder llevar a casa algo de comer.
En eso estaba, cuando vio a tres muchachos, muy cerca de él, que molestaban y golpeaban con palos a una tortuga.
- ¿Cómo se atreven a lastimar a una criatura como esta? – gritó Urashima Taro, mientras perseguía a los muchachos. Los tres muchachos huyeron y Urashima Taro se acercó a la tortuga para ver si estaba lastimada. Cuando vio que la tortuga estaba bien, la devolvió al mar.

A la mañana siguiente, Urashima Taro regresó a la playa y vio la cabeza de la tortuga asomarse entre las olas.
- Te debo la vida – dijo la tortuga agradecida, mientras salía del agua y se acercaba al pescador -. Como muestra de agradecimiento, quiero que vengas conmigo. Te llevaré a conocer el Palacio del Dragón.
Urashima Taro pensó que sería fantástico ir allí. Todos saben que el Palacio del Dragón está bajo el mar y hablan de su hermosura, pero nadie lo había avisto. El muchacho realmente quería ir, pero no quería dejar sola a su anciana madre.
- No tardaremos – prometió la tortuga.
Urashima Taro aceptó la invitación y subió sobre el caparazón de la tortuga. La tortuga se sumergió en el mar.

Al avanzar por entre el agua, se acercaron a un castillo que relumbraba por estar cubierto por oro y plata. Del castillo salió una princesa hermosa, ricamente vestida. Iba rodeada por sus damas de compañía y una corte de peces de colores. La princesa invitó a Urashima Taro a entrar al castillo. El muchacho estaba maravillado. Mucho más se sorprendió al ver que adentro había un espléndido banquete servido para él.

El joven pescador se deleitó comiendo platos y postres exquisitos que parecían no acabarse nunca. También bebió vinos magníficos. Entre tanto, hablaba con la princesa sin dejar de pensar en lo hermosa que era. Además Urashima Taro se entretenía oyendo una música que lo envolvía y viendo a las doncellas y a los peces bailar graciosamente. Urashima Taro estaba bajo un encanto. Antes de que pudiera darse cuenta, habían pasado lo que a él le parecieron 3 años.

Finalmente, el pescador salió del encanto y quiso volver a su casa.
Sentía mucho dejar a la princesa y el fantástico Palacio del Dragón, pero quería volver a ver a su madre. La Princesa del Mar pareció entristecerse mucho. Como regalo de despedida, le entregó al pescador un pequeño cofre con tres cajones, y le dejó:
- Si alguna vez te encuentras en problemas o te sientes perdido, ábrelo - Urashima Taro subió de nuevo sobre el caparazón de la tortuga, llevando el cofrecillo bajo su brazo.
Así emprendió el regreso a casa para ver a su madre. Subiendo por el agua, al fin llegaron a la playa.

De regreso en la aldea, Urashima Taro se sorprendió al ver que los ríos y las montañas habían cambiado su forma hasta hacerse irreconocibles, y que muchos árboles habían muerto. Al acercarse a un viejo campesino, Urashima Taro le preguntó:
- ¿Acaso sabe dónde puedo hallar la casa de Urashima Taro, un pescador que solía vivir cerca de aquí?
El viejo le respondió:
- Cuando mi abuelo era un hombre joven, se decía que alguien así llamado había viajado al Palacio del Dragón. Jamás se volvió a saber de él.
Urashima Taro se sintió muy solo y abatido. Su querida madre había muerto y todo lo que quedaba de su casa era un jardín crecido.
Sin saber que hacer, Urashima Taro recordó el cofrecillo y las palabras de la Princesa del Mar. Lo tomó en sus manos y abrió con cuidado el cajón de arriba.
En él encontró la pluma de una grulla. Luego abrió el cajón del medio y de inmediato salió un humo blanco que lo envolvió. En apenas un instante, Urashima Taro se convirtió en un hombre encorvado y de pelo blanco. Al mirarse en el espejo en el fondo del cofrecillo, Urashima Taro se sorprendió al ver cuanto había envejecido.

Mientras pensaba en como era esto posible, una ráfaga de viento levantó la pluma de grulla y la llevó por el aire hasta posarla sobre la espalda de Urashima Taro. En un momento quedó convertido en una grulla. Desplegó sus alas y voló hacia el cielo. La tortuga asomó su cabeza sobre las olas para verlo volar. La tortuga no era otra que la Princesa del Mar.

 

jueves, 1 de septiembre de 2011

Una nota sobre el Haiku.


“…ni antes ni ahora el Japón ha sido para nosotros una escuela de doctrinas,
 sistemas o filosofías sino una sensibilidad. Lo contrario de la India:
no nos ha enseñado a pensar sino a sentir.”
Octavio Paz.

“kokoro es más, es el corazón y la mente,  la sensación y el pensamiento y las mismas entrañas,  
como si a los japoneses no les bastase sentir sólo con el corazón.”
Juan José Tablada

Como occidentales, culturalmente constituimos Oriente como un opuesto, por lo que a lo largo del entrenamiento debemos esforzarnos en des-aprender ciertos principios naturalizados que dificultan el desarrollo de lo que nos propone el budo. Así, al ser miembros de un arte japonés, tenemos el privilegio de acercarnos un poco y establecer vínculos con una cosmovisión encantadora. El arte que practicamos manifiesta ideas fundamentales que podemos encontrar también en otras artes japonesas -y en la vida misma cuando nos impregnamos de esta visión-.
Japón es un país que destaca por su elegancia estética y esencia particular, y encontramos una bella definición de esto en la reflexión del escritor japonés Junichiro Tanizaki expuesta en El Elogio de la Sombra. El ensayo da cuenta de la oscuridad -o sombra- como un elemento propio de su cultura ya que, en ella, la oscuridad corresponde a un modo de expresión o a un tipo de voz. Desde la perspectiva nipona es posible encontrar un sentido en la oscuridad, porque en lo no dicho, en la imperfección y en lo incompleto, existe un mensaje esencial que se quiere proteger de la tergiversación del lenguaje.
Un ejemplo de estas expresiones -que, tal como el budo, expresa sus fundamentos culturales- es el haiku. En el ensayo “La tradición del haiku”, Octavio Paz escribe que la imperfección a la que refiere dicha elección estética no es la misma que podría entender un occidental, sino, un voluntario inacabamiento que manifiesta una “conciencia de la fragilidad de la existencia, conciencia de aquel que se sabe suspendido entre un abismo y otro… equilibrio entre la vida y la muerte”. Para el ideal estético japonés el papel del espectador tiene gran importancia, ya que es quien está encargado de completar los sentidos sugeridos por medio de su interpretación. El arte propone y el espectador interpreta y crea en aquellos espacios sombríos que lo constituyen.  
A pesar de la dificultad intrínseca a su idioma, la literatura japonesa ha sido objeto de fuerte interés fuera de su país y una de sus formas más interesantes es el haiku, forma clásica de la poesía japonesa consistente en tres pequeños versos que utilizan la forma métrica 5-7-5, es decir, el primer verso de 5 sílabas, el segundo de 7 y el último de 5. El haiku parece comprometer una síntesis de los aspectos más representativos de la cultura del Japón y, a pesar de su dificultad, ha sido una de las formas más experimentadas de la poesía japonesa por escritores y no escritores de Japón y también de otras culturas.
El haiku representa un ideal de poesía pura, esto significa que pretende alcanzar un contenido trascendente y universal más allá de la ornamentación formal típica de la poesía. Por lo mismo, su realización se caracteriza más bien por la ausencia de intelectualismo, encarnando el deseo de no oscurecer las cosas con pensamientos, palabras, formas innecesarias y sentimientos. En contraste con otros tipos de poesía, el haiku debe verse desposeído de la presencia del poeta, la intención de éste no debería ser comunicar su personalidad o sus experiencias, sino exponer una sensación completamente depurada de su subjetividad. El interés absoluto está puesto en el objeto que inspira la poesía, y este objeto suele ser una cosa o algún hecho ordinario revalorizado.
La fuerza del haiku está en la sugerencia y, como toda forma poética, pone gran énfasis en la imagen: el haiku es enteramente imagen, pero imagen incompleta, esbozo de una imagen, sugerencia. Hay tanto sentido estético en lo expresado como en lo silenciado. La forma breve del haiku tiene que ver directamente con su sentido religioso: el haiku es resultado de un momento de iluminación donde el poeta fue capaz de captar el significado atemporal de alguna cosa, el sentido universal que florece en un hecho o cosa particular. Por esto el haiku se compara a un momento de éxtasis, ya que su forma correspondería a la primera emisión normal de palabras expresadas en un momento de iluminación. Después de aquella emisión, toda palabra será un sobreañadido.
La verdadera comprensión en Japón radica en entender que la inestabilidad es intrínseca a todas las cosas, las definiciones abstractas no representan un objetivo, sino más bien una falta de sabiduría. La verdadera sabiduría radica en la posibilidad de encontrar una y otra  interpretación en una misma visión. Por esta razón, el haiku no apunta a lo bello sino a lo significativo, la belleza arriesga la impresión subjetiva, mientras que lo significativo alcanza a todo espíritu humano. “La perfección pone límites a la imaginación…” es por esto que el japonés gusta del misterio, de lo sugerente e imperfecto.
En Japón todo el mundo lee y quizás también escribe poesía. El haiku es la forma más popular y se considera como la representación más natural en la escritura poética. La poesía es, tradicionalmente, la forma universal de expresar toda emoción. La poesía está al alcance de todos los humanos, contrario a Occidente “Canta, oh musa…”, el japonés no pide inspiración, porque la poesía es tanto de dioses como de humanos, por esto no debe volverse a nadie para conseguir la iluminación concretada luego en poema. Además, por sus antecedentes religiosos, el japonés siente simpatía por todo lo animado y por esto puede dialogar con todas las cosas de este mundo, incluso con los seres más "insignificantes". 
El haiku posee un sentido moral que acompaña a todo japonés en su vida cotidiana y se le aproxima como una instancia de liberación:
“¿Estás disgustado? Entonces no digas nada malo; compón un en seguida un poema; ¿Tu persona querida ha muerto? No te abandones a una desesperación estéril; trata de calmar tu espíritu componiendo un poema; ¿Estás preocupado porque te hallas a punto de morir dejando tantas cosas inacabadas? Entonces sé valeroso, y compón un poema sobre la muerte.”


De igual manera, nosotros podemos decir: Entonces sé valeroso, y a seguir entrenando. Banpen Fugyo.

Bibliografía:

Rodríguez-Izquierdo, Fernando. El haiku japonés, historia y traducción. Madrid: Hiperión, 1994.

Paz, Octavio. “La tradición del haiku” en Sendas de Oku  de Matsuo Basho. Disponible en: http://isaiasgarde.myfil.es/get_file?path=/basho-matsuo-senda-de-oku.pdf

Una antología virtual de haiku: